Nuestras uñas están formadas básicamente por una
proteína indispensable que nos ayuda a su correcto
crecimiento y formación: la queratina. Se necesita
de un buen aporte de vitaminas para mantenerlas
en buen estado, así como una cantidad adecuada
de minerales y aminoácidos. Sin embargo, la falta
de alguno de estos elementos ocasiona problemas
en las uñas. Por ejemplo, las uñas quebradizas.
Remojar por 15 a 30
minutos las yemas de los
dedos en media taza de
aceite de oliva todas las
noches antes de acostarte,
con el fin de hidratar las
uñas evitando así que se
resequen y se rompan.
Sumergir las uñas en un
recipiente que contenga
vinagre de sidra de
manzana todas las noches,
antes de acostarte,
durante 15 días.
Sumergir las uñas en agua
tibia con una cucharada
de bicarbonato de sodio
durante 15 minutos
una vez por semana.
Masajear las uñas con
aceite de ricino, lo cual
alivia las cutículas y las
uñas resecas y agrietadas.
Para ello, aplica una gota
de este aceite a cada una.
El aceite de ricino contiene
vitamina E que ayuda a que
la uña se fortalezca y le da
brillo.
Cortar y machacar un
diente de ajo crudo y
colocar dentro de un
esmalte transparente. Dejar
reposar por una semana y
luego pintar con esta
preparación las uñas.
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Estos son algunos tips naturales para
restaurarlas y evitar que se quiebren.
T I P S N A T U R A L E S
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