Farmacias GI

GENTE SEPT-OCT 2015

Farmacias GI Mujer

Issue link: http://gruporeforma.uberflip.com/i/564956

Contents of this Issue

Navigation

Page 20 of 35

HAZ CONCIENCIA 21 aumento progresivo de la incidencia y pre- valencia de hipertensión arterial. El exceso de sal provoca aumento de la presión arterial e hipertrofia cardiaca, y por esta vía, aumenta los eventos cardiovas- culares: infarto del miocardio y accidente vascular cerebral. También provoca mayor incidencia de insuficiencia renal e insufi- ciencia cardiaca. Siempre que se piensa en controlar los niveles de presión arterial se recomienda moderar el consumo de sal, pero estudios recientes señalan que la causa de la hiper- tensión arterial podría ser más del azúcar que del sodio. La mayor parte del sodio de la die- ta deriva de alimentos procesados, que precisamente, también contienen ele- vadas proporciones de azúcares, en- tre los que destaca el jarabe de maíz de alta fructosa que podría ser el ma- yor causante de hipertensión arterial y otros problemas cardiovasculares. El consumo excesivo de fructosa aumen- ta la frecuencia cardíaca, el gasto cardiaco, la retención renal de sodio y la resistencia vascular. Todos estos factores interactúan para elevar la presión arterial y aumentar la demanda de oxígeno del miocardio (que es el tejido muscular del corazón). Por lo tanto, quizá sea momento de mirar también al azúcar y no tanto al sodio cuan- do se trata de controlar la presión arterial y prevenir enfermedades cardiovasculares, pues los azúcares no sólo pueden favore- cer el desarrollo de hipertensión arterial sino también, de otras patologías asociadas al metabolismo y a procesos inflamatorios, envejecimiento prematuro de las células y resistencia a la insulina o diabetes. ¿QUé HACeR? El cuerpo puede adaptarse a un menor consumo de sal, aunque puede tardar 2 o 3 meses en habituarse a consumir la mitad de sodio de lo acostumbrado. Existen otras maneras de condi- mentar la comida, como el mayor uso de pimienta y de hierbas aromáticas y especias, frescas o secas. Los sustitutos de la sal, basados en compuestos de potasio, también pueden servir; además también contribuyen a aumentar el consumo de potasio. También el disminuir la ingesta de azucares simples (como los alimentos industrializados) puede traer benefi- cios a nuestra salud y disminuir los ni- veles de presión arterial. El consumir azúcar (incluyendo fructosa) en su forma natural, como la que se encuentra en las frutas, no per- judica al organismo, sino más bien lo beneficia y aporta además vitaminas y minerales esenciales. Consulta a tu médico

Articles in this issue

Archives of this issue

view archives of Farmacias GI - GENTE SEPT-OCT 2015