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HAZ CONCIENCIA 21 Causas El desfasamiento entre las calorías que se consumen y las que se utilizan en las actividades que se realizan durante el día, genera un excedente de energía que el organismo no necesita y lo metaboliza en forma de grasa para almacenarlo en dife- rentes zonas del cuerpo. Comer alimentos con altos niveles de azúcares, grasas y calorías. Una vida sedentaria, es decir que no nos movemos, sentados en un trabajo o uti- lizando medios de transporte que ade- más se vuelven necesarios. Los líquidos endulzados son más ac- cesibles que la misma agua simple. La constante difusión comercial de pro- ductos que son considerados como chata- rra (frituras, galletas, harinas, comida rá- pida, etc.) que son promovidas por marcas transnacionales y que favorecen la ingesta desmesurada. Prevención Integrarse a la prác- tica cotidiana y habitual de algún de- porte o por lo menos, caminar durante 30 minutos mínimo por día. Ingerir durante el día agua natural o sin endulzantes en cantidades entre 1.5 a 2 li- tros (dependerá de cada organismo y de la estación del año). Evitar en la medida de lo posible, hacer uso de medios de transporte para traslados cortos; subir escaleras en lugar de utilizar elevadores, evitar el uso de dispositivos de control remoto dentro del hogar, etc. ¿Qué hacer? Se debe tratar de hacer un alto y centrarse en sí mismos para ver cuáles son las razones, y en qué momentos se está utilizando la comida como un medio para satisfacer las necesidades psicológicas (tristeza, enojo, soledad, etc.) para que de esta manera se puedan mejorar y controlar los hábitos alimenticios propios y de los hijos. Sólo así se puede mejorar y tener una mayor calidad de vida para sí y para tus seres queridos. Consulta a tu médico para un tratamiento integral para que logres equilibrar tu peso. Factores psicológicos asociados a la obesidad Actualmente, como una patología, se come en respuesta a una reacción a nues- tras tristezas, nerviosismo, insomnio, ansiedades, vacíos, recompensas y falta de seguridad, timidez, depresión, entre otros muchos ejemplos. Una reacción in- consciente a estas situaciones deriva en la ingesta de alimentos que regularmen- te contienen altas cantidades de azúcar y harinas. Por esta razón, hay que estar muy atentos en el físico y en todos aque- llos pensamientos y sentimientos, ya que las necesidades psicológicas pueden ser determinantes para este tipo de problema.